lunes, 8 de noviembre de 2010

Emparedadas

Jueves 11 de Septiembre de 2010.

A la nana, nana

que hoy quiero ver

a un niña niñita

llamada Belén

Con agua de romero

yo la bañaré

para que la luna

la acune después

Con soles y flores

la recibiré

cuando el día llegue

para mi Belén.

Dormida está mi princesa, dormida va.

Hemos improvisado unas camas con las toallas que había en una de las baldas. Belén está durmiendo placidamente en uno de los rincones del armario, acurrucada con su muñeca entre los brazos, parece una princesa. Es terrible que una niña de su edad tenga que pasar por todo lo que está pasando. Confiemos en que cuando finalice todo esto no tenga malas consecuencias en su vida.

Por suerte encontramos unas barritas energéticas en una de las cajas que había junto a los medicamentos. No es el alimento mas recomendado para una alimentación sana, pero nos valdrá para sobrevivir unos días.

La niña tiene pesadillas continuamente. Cuando consigue cerrar los ojos para conciliar el sueño, no dura mas de 2 horas sin una de ellas. Yo ya no sé como aliviarla, cada vez son mas fuertes e incontrolables. Temo por ella.

La herida de mi tobillo no tiene muy buen aspecto. Lo tengo muy inflamado y alrededor puedo observar sangre cortada de un color negruzco. Me la estuve lavando con unos botecitos de suero fisiológico pero no han conseguido mejorar su aspecto. Creo que tendré que mirar mas detenidamente entre los medicamentos en busca de algún antibiótico.

Aún podemos oír los ruidos y gruñidos fuera de la habitación. He de pensar en algo pronto, pues en estas condiciones no vamos a sobrevivir demasiado tiempo.

Quizás si observ

No hay comentarios:

Publicar un comentario